La segunda película de las precuelas se estrenó en 2002, dirigida por George Lucas, continua con la historia de Anakin Skywalker ya como un joven padawan excepcional en sus habilidades con la Fuerza y con el conflicto político que vive la República durante esos años.
El film va en esos dos ejes, Anakin como personaje y sus interrelaciones con Obi-Wan, con Padmé, con el Canciller; y como entre todo eso las maquinaciones políticas siguen moviéndose, preparando un conflicto legendario en el lore de Star Wars, las guerras clon, mencionadas de pasada en el episodio IV y desarrolladas muy poco en el antiguo Universo Expandido.
La película inicia fuerte con el atentado fallido contra la ahora senadora Amidala (curiosa la monarquía electiva de Naboo, donde el puesto es elegido por voto popular a pesar de su aparente tradicionalismo) por su posición contra la formación de un ejército de la República ante la amenaza secesionista de la Confederación de Sistemas Independientes (los separatistas)
Obi-Wan y su díscolo padawan Anakin, acaban de regresar de una misión en Ansion, (tal cual narra la novela previa La llegada de la tormenta) y son asignados a proteger a la senadora. Dos puntos a reflexionar: Palpatine es quien propone a Kenobi y su aprendiz como protectores, como luego se explica Anakin siempre tuvo una relación estrecha con el Canciller, por ende le habrá confiado sus sentimientos hacia Padmé, ¿Palpatine habrá empujado dicha relación platónica hacia un terreno más material con esta asignación?, ¿sabía que provocaría aún más conflicto emocional en el joven padawan? Todo parece indicar que es así.
Segundo punto, la increíble negativa de los maestros Jedi en ver el peligro que era el Conde Dooku (Ki-Adi Mundi equivocándose totalmente, como en Episodio I donde niega igualmente que los Sith siquiera existan) como si no hubiera suficientes antecedentes de Jedi caídos en su historia. Los hace ver muy ingenuos y cada vez más desconectados de la realidad que los supera.
Luego la historia continua como ya muchos conocen, solo mencionaremos algunos puntos importantes sobre Anakin y sobre el conflicto que termina de surgir, ya que esta reseña se presenta desde la perspectiva de las guerras clon.
Primero la relación no permitida de Anakin y Padmé, pero que ningún otro personaje cree que es posible, tranquilamente los mandan lejos y solos como si no fueran jóvenes, aunque senadora y padawan, jóvenes al fin y al cabo. Solos en lugares paradisiacos, ni siquiera en un lugar seguro y por ende incómodo, no, en una mansión en las montañas de Naboo. En tales circunstancias el romance era inevitable y muy predecible. (otra cosa es su verosimilitud por las actuaciones, pero es conocido que Lucas no es un gran director de actores...)
Romper ese idilio con el regreso a Tatoinne y la tragedia de la madre es un contraste fuerte con la tranquilidad en Naboo. La secuencia de Anakin y su madre tiene toda la fuerza que debe tener, ya que es un punto de inflexión en la vida del joven Jedi, aunque mal actuada igual deja la sensación correcta que algo en él se rompió.
Eso me lleva a la otra consideración ¿Por qué Obi-Wan nunca hizo caso de los sueños/visiones de su aprendiz? estoy totalmente seguro que Qui Gon le hubiera hecho caso y habrían viajado a Tatoinne desde el primer momento. Eso abona a la increíble relación maestro-alumno que hay entre Kenobi y Skywalker... Es casi ofensivo el trato entre ambos, durante toda la película pasan en desacuerdos y con puyas e indirectas (cosa que se suaviza algo en los siguientes productos, pero no mucho) ¿no debió Kenobi notar que era mucho para él? quizás la guerra llevó todas esas consideraciones a un segundo término, agravando la situación.
Un aspecto muy bien tratado fue el surgimiento del ejército clon. La conspiración a su alrededor, la inevitabilidad de su uso. Aunque fue obvio que su creación fue hecha a espaldas del Consejo y del Senado, nadie dudo en seguir adelante pues debía hacerse ante el numeroso ejército de droides que los separatistas tenían a su disposición. Me gustó la manipulación simplona sobre Jar Jar Binks para reformar las funciones del Canciller. Cuando Kenobi encuentra Kamino y su ejército ya listo son escenas memorables y recuerdan algo a Matrix y sus granjas humanas.
Ya con el conflicto imparable la (primera) batalla de Geonosis es espectacular, dejando bien claro que los clones son una fuerza militar apabullante (otra reflexión, ¿el equipo y los vehículos del ejército son de la República o lo dieron los kaminoanos por el mismo precio?) nos muestran su eficiencia y superioridad ante los droides, al menos en el aspecto táctico.
Es de hacer notar el papel de los Jedi en este conflicto, como luego del enfrentamiento con los droides que casi pierden, toman de forma natural el mando de varios batallones de clones y Yoda rápidamente empieza a dirigir los ataques y la estrategia. En cambio en productores posteriores de las guerras clon, se discutirá mucho el papel militar de los Jedi, garantes de la paz, en el nuevo orden de las cosas, como veremos en esas reseñas, el pasar de monjes guerreros para misiones específicas a generales al mando de ejércitos decidiendo quien vive y muere, es algo bastante extremo y no siempre fue tan natural como puede verse en la película.
Finalmente quisiera remarcar el entramaje político que me pareció bastante bueno y deja la clara lección de la historia, el primer paso para minar una democracia es acumular funciones y poderes en un solo individuo, Palpatine utiliza el conflicto para alcanzar esto y lo hace muy bien.
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